
Arranca el tambor
dos dos tres dos dos cuatro,
las cuerdas del bajo,
atacando, atacando,
y la sangre te hierve,
te provoca la prisa,
el salto, el jirón,
media vuelta
y deslizas…
Tu figura que crece,
permanece en un trance,
y de trompetas el aire
se llena,
y respiras y sientes cada nota
llenarte,
de la tierna energía,
de la enérgica tierna,
celosa y sensual
agonía,
y del placer de bailar
bajo el sol.
¡Ay que luz,
media noche!
¡Qué mar!
¡Qué alegría!
C.2022, Francisco Bravo Cabrera, 12 de septiembre de 2022, València, España 🇪🇸
Imagino esos ojos aún viéndola bailar con exquisita ternura.
Excelente escrito.
Saludos.
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Muchísimas gracias. Me honran tus palabras tan bellas y te las agradezco grandemente. Un saludo desde València.
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Exquisitely captures the joy of dancing. Nice poem!
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Thank you so much Dawn!
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